- Una vez decidido qué le corresponde a cada nivel toca ponerse manos a la obra, con ganas y creatividad y sin olvidar todo lo que aprendimos nuestra selva y nuestra sabana van tomando forma.
- Arrastramos un par de bancos y una pesada pizarra que forramos de papel para dividirlo en dos partes, en una situaremos la selva y en otra la sabana.
- Para el suelo de la primera carretamos tapines de hierba, para la sabana hierba seca traida de un "prao". Con papel de plata se hace el río y después se van colocando árboles y piedras
- Ya pueden ir llegando los animales, ahora tocará aplicar lo aprendido ¿dónde vive cada uno?
- Todo es muy divertido, cada día encontramos algo nuevo, debe ser que por la noche algo ocurre que no vemos...
Al llegar la noche los tigres se juntan en manada para contar historias ¿o será un sueño? |